La obesidad se ha convertido es uno de los problemas más graves de la sociedad actual. Todos los gobiernos se abocan a la resolución de este problema sociosanitario.
La evolución histórica ha conseguido que la alimentación sea cada día más higiénica, más saludable y más funcional. Los parámetros o modelos de las instituciones internacionales son muy claros en cuanto a la alimentación. Sin embargo la ambigüedad de los parámetros institucionales y la publicidad engañosa han implantado parámetros y modelos alimenticios puramente economicistas.
Pongamos algunos ejemplos, en España la tradición alimentaría habla de una dieta mediterránea, que hoy en día es altamente valorada por las instituciones internacionales, sin embargo la población española basa su alimentación en la llamada dieta basura.La alimentación en los países desarrollados se caracteriza por un exceso de alimentos demasiado calóricos y con un elevado contenido en grasas y azúcares y pobre en hidratos de carbono complejos.
Este tipo de alimentación se asocia con una serie de enfermedades crónicas como son las enfermedades coronarias, las enfermedades cardiovasculares, la diabetes, la anorexia, determinados cánceres, las caries, las enfermedades digestivas y algunas afecciones osteoarticulares.
